niños

Aprender a vivir con el no.

 

Para los niños es importante aprender qué se siente y cómo se vive con un no como respuesta, tanto para su desarrollo emocional como cerebral.

Está demostrado que cuando los pequeños se enfrentan a una respuesta negativa, generan en su cerebro sustancias que les hacen posible enfrentar los obstáculos y les enseñan a reaccionar ante los cambios e imprevistos.
En cuanto a su desarrollo emocional, es clave que aprendan que no todo es posible, que la vida tiene cambios y que hay que superarlos. Esto los hace madurar.

Además, muchos de los límites que los padres definen en la vida de sus hijos tienen que ver con evitar el daño a los demás, el respeto hacia los mayores y a sus padres, lo que es una forma de enseñarles también el amor y el respeto por sí mismos.

Los límites no son un montón de reglas para toda la vida, son sencillamente las normas fundamentales para desenvolverse en el día a día, y son aquellas que su familia considere necesarias para vivir de acuerdo con sus valores y su filosofía, pues cada una es única.

Tampoco se trata de hacerles la vida más difícil para que aprendan desde los 2 años lo dura que puede ser. Los límites son naturales y lo que se busca es evitar que el pequeño haga todo lo que quiere, se salga siempre con la suya o logre lo que desea con base en rabietas y pataletas.

A los 2 años de vida, esta tarea puede comenzar a complicarse porque su hijo no querrá obedecer, querrá mostrarles una y otra vez que él ya es un grandulón y que sabe valerse por sí mismo. Su tarea consiste en mantener el equilibrio, algo no tan fácil pero alcanzable. Aquí les damos algunos consejos para ello.

Fuente: 
http://www.eltiempo.com/estilo-de-vida/educacion/ensenar-a-los-ninos-a-respetar-limites/16607964

Uno de cada diez niños sufre un trastorno de aprendizaje

Uno de cada 10 niños sufre algún tipo de trastorno del aprendizaje, ya sea dislexiadéficit de atención e hiperactividad (TDAH), discalculia u otros específicos del lenguaje como algunos de los más comunes.

Así han coincidido en destacarlo expertos reunidos en las primeras Jornadas Moisès Broggi de Atención Centrada en la Persona sobre 'Trastornos del Aprendizaje y fracaso escolar', organizadas por la Fundación Letamendi-Forns con la colaboración de la Unidad de Trastornos del Aprendizaje Escolar del Hospital de Sant Joan de Déu.

Los trastornos del aprendizaje están directamente relacionados con el fracaso escolar o con el abandono escolar precoz, y algunas de las consecuencias de no abordar correctamente estos trastornos podrían ser la limitación de la igualdad de oportunidades socio-laborales, problemas en el desarrollo personal de los niños, problemas de salud o precariedad económica en la vida adulta.

El pediatra y responsable del Equipo Territorial de Pediatría Alt Penedès-Garraf del Institut Català de Salut (ICS), Vicente Morales, ha explicado que estos trastornos "no son una sentencia hacia un futuro fracaso", si se lleva a cabo una detección precoz, aprendizaje adaptado y un buen apoyo socio-familiar.

De esta forma, "los niños pueden mejorar su rendimiento académico y acceder a una formación post-obligatoria y, en muchos casos, también universitaria", ha añadido.

Los trastornos del aprendizaje son alteraciones del desarrollo neurológico que condicionan que un niño con una inteligencia normal tenga dificultad en uno o más aprendizajes.

Afectan a un 10-15% de la población en edad escolar y tienen un componente genético en el que pueden confluir otras patologías adquiridas, según ha explicado la neuropediatra del Servicio de Neurología del Hospital Sant Joan de Déu y Coordinadora de la Unidad de Trastornos del Aprendizaje Escolar, Anna Sans.

Fuente: 
http://www.elperiodico.com/es/noticias/educacion/uno-cada-ninos-sufre-trastorno-aprendizaje-4230413

El contacto con los idiomas durante los tres primeros años de edad

Los niños que asimilan un idioma nuevo a los tres años procesan de forma más eficiente y competente cada lengua extra que aprenden

Durante mucho tiempo se ha sugerido que las experiencias de los primeros años de vida afectan fuertemente al desarrollo posterior. Pueden ser acontecimientos emocionales que dejan huella pero también experiencias relacionadas con el lenguaje. Un nuevo estudio de la Universidad McGill y el Instituto Neurológico de Montreal ha demostrado que incluso una exposición muy temprana y breve a la lengua materna influye en cómo el cerebro procesa sonidos de un segundo idioma más adelante. Así la primera lengua no se vuelva a hablar nunca más. 

La conclusión a la que han llegado los investigadores es que si un niño chino es adoptado por una familia francesa a los tres años, y a partir de entonces deja de lado su lengua materna, tendrá un desarrollo neurológico distinto y procesará los sonidos de otros idiomas de manera diferente a un niño que siempre haya hablado francés. "Esa primera lengua "olvidada" influye en lo que pasa en tu cerebro ahora, cuando hablas cualquier otro idioma", explica Lara Pierce, una de las autoras del estudio.

Durante las pruebas, los niños franceses y los adoptados activaron las mismas zonas cerebrales de procesamiento del lenguaje. Los segundos, además, utilizaron áreas adicionales relacionadas con la memoria de trabajo y auditiva y la atención general. "Estos resultados sugieren que las diferencias de aprendizaje que experimentaron en sus primeros tres años de vida afectan a sus patrones cerebrales de activación años más tarde", cuenta Pierce.

Los niños chinos que fueron adoptados por familias francesas utilizan más las áreas cerebrales implicadas en tareas de memoria no verbal. También las de la atención y los procesos de control cognitivo, lo que implica que los niños adoptados tienen un procesamiento más eficiente y competente en el aprendizaje de una lengua extra más allá del francés. Según los investigadores, esto demuestra la "extraordinaria flexibilidad" del cerebro para adaptarse a nuevas circunstancias ambientales y la utilización de sistemas alternativos para nuevos aprendizajes si los sistemas iniciales no están disponibles.

Fuente: 
http://cultura.elpais.com/cultura/2016/01/14/actualidad/1452785196_563734.html

Ayúdalos a desarrollarse en cada etapa

Estimulación Temprana 

La estimulación temprana en los niños es un conjunto de técnicas y actividades que se emplea en niños desde su nacimiento hasta los seis años, con el objetivo de desarrollar al máximo sus capacidades cognitivas, físicas y psíquicas, que permite también, evitar estados no deseados en el desarrollo y ayudar a los padres, con eficacia y autonomía, en el cuidado y desarrollo del infante.

Yahaira Wagner Alvarado, experta en estimulación temprana, indicó que una de las principales preguntas de los padres cuando traen por primera vez a un hijo es ¿Qué hacer en cada etapa del desarrollo? Es por ello que la especialista señala que los papás deben saber que la mejor guía para el desarrollo de su hijo es el que se da de la cabeza a los pies.

Recomendación según etapa

  • 0 a 3 meses

Los bebés se van desarrollando de la cabeza a los hombros. “Lo importante de trabajar en esta etapa es visión, audición, lenguaje”, dijo la doctora.
En este caso se recomienda que los juguetes ideales para ellos sean de texturas y en color blanco y negro. En cuanto a la forma del juguete, pueden ser redondos y cuadrados.

  • 3 a 6 meses

La doctora asegura que el juego perfecto para el niño es aquel que pueda manipular, porque ya tiene un poco más de destreza en el área de su tronco y manos. Ella sugiere que sean juegos de encestar, colocar algo dentro o de agarrar.
En cuanto a colores, lo aconsejable es buscar rojo, azul, amarillo y verde. 

 

  • Cuando cumple los seis meses

los juegos de ensayo y error son lo mejor, estos son los que si no los haces bien no habrá una reacción. Como por ejemplo: encestar o tocar un botón para que el animal haga un sonido.

  • De 6 meses en adelante

Para los que empiezan a ponerse de pie solitos, son perfectas las mesas didácticas con un montón de actividades que estimulan al bebé con botones, manecillas, luces y sonidos. Asimismo, para los que empiezan a dar sus primeros pasos antes de cumplir el año, los correpasillos les ayudan a mantener el equilibrio y les sirven de apoyo en esta etapa.

Fuente: 
http://www.critica.com.pa/viva/ayudalos-desarrollarse-en-cada-etapa-393642

¿Cómo inculcar hábitos de estudio en los niños?

Te explicamos cómo y cuándo inculcar unos buenos hábitos de estudio en los niños, que permitirán a tu hijo optimizar su tiempo y esfuerzo, y contribuirán a que su rendimiento académico mejore progresivamente.

Cómo inculcar hábitos de estudio en los niños

Para la mayoría de las personas el factor determinante para tener éxito académico es el nivel de inteligencia que cada uno tiene. Si bien es cierto que no se puede negar que es un hecho muy importante, no podemos obviar uno más significativo aún: los hábitos de estudio.

Se considera hábitos de estudio el tiempo que dedicamos a estudiar y lo que el estudio comporta en sí; es decir, no se trata sólo del tiempo o el esfuerzo que destinemos al ejercicio de memorización, sino el que empleamos en desarrollar todo el trabajo previo y posterior (resúmenes, esquemas, lecturas…). Además de la variable tiempo, debemos controlar la calidad del trabajo que se realiza en ese tiempo, y el ambiente en el que se desarrolla.

¿A qué edad hay que inculcar hábitos de estudio en los niños?

Los hábitos de estudio son adecuados, e incluso necesarios, durante toda la vida académica de una persona, ya que la dificultad de las tareas se incrementa con el paso de los años, y es conveniente haber cimentado desde pequeños una buena ética de trabajo y de esfuerzo. Si nos paramos a pensar en los peques que empiezan el colegio con tres años, podemos plantearnos qué tienen que estudiar a esa edad para necesitar estos hábitos. Pues bien, puede que los colores, la grafía, los números o las vocales ya los conozcan y no requieran un trabajo extra fuera del aula, pero sigue siendo ideal que en casa se sienten todas las tardes con sus padres y repasen lo que han visto ese día en clase, que les dejen pintar libremente en un cuaderno o, mejor aún, que les lean un cuento.

El objetivo principal no es conseguir que adquieran muchos más conocimientos (en lo referente a los hábitos de estudio en esta edad eso es secundario), de lo que realmente se trata es de que desde pequeños entiendan que fuera del colegio hay que seguir haciendo cosas de clase, y que no hay dos mundos tan diferentes en donde en uno se estudia y en el otro no. A esta edad puede que aún no vayan a la escuela, pero aun así se les deben inculcar unos buenos hábitos de estudio, puesto que después en las aulas se aprecia la gran diferencia que existe entre los alumnos que llevan tiempo trabajando en sus casas y los que se introducen en el sistema educativo a los seis años sin ninguna preparación previa.

Estas diferencias son subsanables y, de hecho, se pueden asumir al inicio, pero requieren un trabajo mucho mayor para docentes y padres si se desea que estos niños no vayan por detrás de sus compañeros desde tan temprana edad. Por eso, acostumbrar a los pequeños a tener unos buenos hábitos de estudio permitirá que, aunque sufran un retraso académico, puedan ponerse más fácilmente al nivel de sus compañeros.

A medida que nuestros hijos van haciéndose mayores las exigencias educativas crecen progresivamente con ellos y, por tanto, tener unas pautas adecuadas de estudio cobra cada vez más importancia.

Fuente: 
http://www.webconsultas.com/bebes-y-ninos/educacion-infantil/como-inculcar-habitos-de-estudio-en-los-ninos-12394

Libros para niños desde los siete años...

Misterio y aventura son las mejores recomendaciones para los niños que están empezando a desarrollar el amor por la lectura.

 

Cuando los peces se fueron volando
Sara Bertrand
Tragaluz

Todos, en algún momento debemos enfrentarnos a la pérdida de un ser querido. En este texto, la escritora chilena Sara Bertrand retrata el duelo desde el punto de vista de un niño aun guiado por la inocencia, que pierde a distintas figuras importantes a lo largo de su infancia: a su padre, a su perra Rosita y a su hermano Andrés. La historia del narrador da vueltas alrededor de estos duelos.

Un libro de esos que bien vale la pena tener a mano para hablar de un tema que no siempre es fácil de abordar.

 

El desierto de los payasos 
Renee Segura y Jim Pluk
Animal Extinto

Esta es la historia del destierro del payaso Risitas de la República de Pueblín, la ciudad natal de los payasos, porque ya no es capaz de ser feliz. Pueblín es una ciudad donde solo existen los colores y la felicidad, y donde por ningún motivo se puede mencionar la muerte. Risitas recientemente perdió a su perro Pulguita y desde entonces no ha podido ser el mismo payaso feliz, por esto han decidido desterrarlo al desierto de la muerte. El cuento narra cómo Risitas logra volver a ser feliz a pesar de la muerte.

 

La niña calva

Jorge Franco Tragaluz
Este libro reúne todos los elementos de una trama de terror: el misterio, la oscuridad y el suspenso. Cuenta la historia de Benjamín, un niño que decide investigar los secretos que esconde una casa frente a la suya que creía abandonada. Tras descubrir que uno de sus habitantes es una niña, establece amistad con ella a pesar de que no se deja ver y él solo puede imaginarla a través de los dibujos que le entrega por la ranura de la puerta. La curiosidad de Benjamín por descubrir los secretos de la casa develará un escalofriante secreto.

 

Las horas finales del castillo de Monserrate

Albeiro Echavarría 
Penguin Random HouseEl cerro de Monserrate es el punto más alto de Bogotá y uno de los lugares turísticos más visitados. Todos los días, cientos de personas recorren la vieja iglesia sin saber que las montañas guardan un secreto en sus profundidades. Por cientos de años, 26 enanos inmortales han vivido en la oscuridad, cuidando las versiones originales de las letras del alfabeto. Pero un día, la guardiana de la letra A desaparece, creando un misterio que debe ser resuelto antes.
 

La pandilla salvaje y el río secreto
Boris Pfeiffer
Panamericana

El lobo Hamlet es líder de una pandilla de animales que busca incansablemente la libertad. En esta ocasión, la pandilla se encuentra escondida en una construcción subterránea abandonada, mientras construye un barco que les permita acercase cada vez más a esa anhelada libertad. Pero entre tanto, tendrán que esquivar varios problemas y jugarle unas cuantas bromas a los humanos. Este es el tercer libro de una serie que sigue las aventuras de este grupo de animales.

 

Fuente: 
http://www.revistaarcadia.com/impresa/libros/articulo/cuentos-infantiles-recomendados-para-filbo-2015/42100

Aprender a reconocer el Trastorno por Déficit de Atención en los niños

 

El Trastorno por Déficit de Atención, o TDAH, es uno de los trastornos que más mitos genera entre los padres: tan sólo un 4 por ciento responde correctamente cuando se le pregunta qué es y en qué consiste. Una cifra sorprendente, sobre todo si se tiene en cuenta que el trastorno afecta a cerca del 7% de niños en España (es decir, entre uno y dos niños por aula). Expertos de innea, centro para el diagnóstico y tratamiento del TDAH, han elaborado un decálogo con diez aspectos poco conocidos del TDAH, entre ellos, el hecho de que el trastorno tenga en realidad un origen neurológico o que, a diferencia de lo que se suele creer, no desaparece con la edad, sino que es un trastorno crónico

¿Qué hay de cierto en torno al TDAH? Preguntamos a los expertos del centro por los ejemplos más prácticos para identificarlo.

Qué es el TDAH y cómo identificarlo
El TDAH tiene un origen neurológico. Las nuevas técnicas de diagnóstico basadas en el mapeo cerebral han permitido identificar las principales zonas del cerebro afectadas por él: el córtex pre-frontal, los ganglios basales, el córtex parietal y el cíngulo anterior. Estas zonas están relacionadas entre sí, e influyen en la impulsividad, la hiperactividad y la falta de atención. Ésta es una de las razones por las que, si no se trata, sus síntomas se presentan en la edad adulta en un cincuenta por ciento de los casos. 

A pesar de todo, el TDAH sigue siendo un trastorno poco entendido y que a día de hoy continúa infradiagnosticado: sólo el 2,5% de niños reciben un diagnóstico correcto, del 7% que se calcula que lo padecen. 'Una de las principales razones por las que la tasa de diagnóstico es tan baja es porque se confunden los síntomas de TDAH con otros diagnósticos o “etiquetas”', nos explican desde el centro innea. 'Por ejemplo, niños que se portan mal, que son maleducados o que sólo quieren llamar la atención: en muchas de estas ocasiones no se acude al especialista para un diagnóstico, o se acude tarde'.

Lo más importante es la concienciación y sensibilización del TDAH. 'Debemos informar a escuelas, madres y padres para que sepan cuáles son los síntomas más frecuentes y puedan detectarlos de forma precoz'. De esta forma, tanto los papás y mamás como los profesores pueden reaccionar antes y acudir a los especialistas para un diagnóstico y tratamiento tempranos. Los signos o síntomas que nos deben poner en alerta frente a un niño con TDAH, según los expertos del centro, pueden resumirse en algunos ejemplos prácticos:

-El niño tiene dificultad en establecer un orden en sus cosas: en la carpeta del cole los trabajos están mezclados sin respetar el orden de los separadores. 

-Pierde la agenda, el móvil, la mochila, la ropa. 

-Pierde mucho tiempo en hacer los deberes porque cualquier estímulo irrelevante le distrae, como ruidos, una mosca, unas voces en la calle. Es un niño al que le cuesta prestar atención a dos estímulos a la vez: mientras ve la televisión es imposible que oiga lo que alguien le dice. 

-Tiene dificultad para entender las instrucciones que le vienen dadas y llevarlas a cabo; a menudo no entiende lo que se le pide que haga, y pregunta cosas que en un principio ya se le han dicho. 

-Actúa y habla sin pensar, y se excita o altera con mucha facilidad, bien ante algo que no le acaba de gustar, bien ante algo imprevisto. 

-No atiende a los detalles y comete errores. Por ejemplo, ante un problema simple de matemáticas, realiza una suma cuando en el enunciado le pedía una resta. 

-A menudo son niños que realizan actividades imprudentes sin pensar en el riesgo

En casa y en el colegio
Una altísima cifra de casos de fracaso escolar -en torno al 20 por ciento-, está asociada a este trastorno. 'Molestan en clase tanto a maestros como a los propios compañeros'. El colegio es de hecho, uno de los ámbitos en el que más padecen los niños con este trastorno. Debido a su dificultad para memorizar y focalizar la atención, aproximadamente el 20 por ciento tienen complicaciones con las matemáticas, la comprensión lectora y la escritura.  

'En el colegio las consecuencias de presentar un trastorno por TDAH son el bajo rendimiento escolar y la mala actitud tanto ante los maestros como con los propios compañeros de aula, lo que hace que el niño tenga problemas de relación con sus iguales y con los docentes', nos explican desde el centro, donde también enfatizan la importancia de prestar atención a los síntomas dentro de casa: 'en casa no se responsabilizan de las tareas que se les asignan o de sus cosas, y son desobedientes, por lo que son frecuentes las disputas con padres y hermanos'. 

¿Afecta de manera diferente a niños y niñas?
Hay diferencias entre los niños y niñas con TDAH. Para empezar, los niños son cuatro veces más propensos a padecerlo. Además, los síntomas son diferentes: mientras que la hiperactividad es el síntoma predominante en ellos, la falta de atención es el más frecuente en ellas. 'Se desconoce por qué afecta de manera distinta. Lo que sí sabemos es que al predominar la inatención en las niñas, al contrario de lo que pasa en los niños que son más hiperactivos, las primeras pasan más desapercibidas porque es un síntoma que no afecta tanto al entorno como la hiperactividad'. Además, al tratarse de un problema neurológico, el trastorno tiene un cierto componente hereditario, y puede manifestarse entre hermanos. 'Se tiene más riesgo de padecer este trastorno si otros hay familiares que lo padecen'.

Adultos con TDAH
Uno de los mitos más extendidos es que sólo se da entre los niños y desaparece en la vida adulta. Pero el Trastorno por Déficit de Atención es crónico, aunque se pueden mejorar y reducir los síntomas hasta el punto de que no limiten el día a día de quien lo padece. En la infancia, los síntomas suelen aparecer antes de los 7 años, y manifestarse en al menos dos ámbitos de la vida del niño, como en casa y el cole. Entre los adultos, los síntomas cambian ligeramente de escenario. 'Los adultos con TDAH son personas que presentan dificultades en el trabajo, en las relaciones sociales y de pareja. Se trata de personas a las que les cuesta concentrarse, son desorganizadas y tienen dificultad para iniciar y terminar proyectos, debido, sobre todo, a la dificultad que presentan en la gestión del tiempo'. Son personas que, además, suelen mantener relaciones cortas, 'cambian de trabajo  a menudo, tienen poca paciencia y, en ocasiones, pueden perder el control. Además suelen conducir de manera temeraria, y a veces acumulan un alto número de multas y consumo de tóxicos'. 

Los tratamientos
La mejor forma de mejorar el comportamiento de estos niños es llevando a cabo un tratamiento multidisciplinar. La elección de dar más peso a uno u otro dependerá de la evolución del niño: cuanto antes se diagnostique y se trate, menor será la necesidad del uso del fármaco por ejemplo. De hecho, cada vez se avanza más en los diagnósticos y tratamientos de este trastorno: los que ofrecen desde el propio centro innea combinan técnicas clásicas (como los cuestionarios, las entrevistas y la psicoterapia) con otras más innovadoras y centradas en la lectura y estimulación de los impulsos eléctricos que emiten las neuronas. 

'A través de ellas, podemos obtener un mapa de las disfunciones cerebrales del paciente y saber en qué áreas del cerebro se encuentra el problema'. Además del tratamiento farmacológico, llevan a cabo cuatro tipos de tratamientos más: neuroestimulación, basada en la estimulación del área disfuncional del cerebro para la mejora de la atención, la impulsividad y las habilidades sociales; neurofeedback, basado en el entrenamiento cognitivo de la atención y la concentración a través de videojuegos terapéuticos; psicoterapia, con modificación de la conducta a través de la enseñanza de estrategias para saber afrontar situaciones conflictivas, controlar impulsos y desarrollar habilidades sociales; y psicopedagógico, basado en la enseñanza de técnicas de estudio, y estrategias para la organización y planificación a corto, medio y largo plazo.

Los tratamientos no sólo facilitan la vida de los más pequeños: también elevan el rendimiento escolar, mejorando las perspectivas de los peques a largo plazo. 'En el momento en que mejoran la atención y la concentración, la mejoría es clara en todas las esferas. Por ejemplo, en el colegio dos de las áreas que más lo notan son las matemáticas y la comprensión lectora. Ambas son asignaturas que requieren mucha concentración, y cuando ésta se trabaja, las notas también mejoran'.

Fuente: 
http://www.hola.com/ninos/2014111775053/trastorno-deficit-atencion-hiperactividad-sintomas/

Que piensa un niño con deficit atencional

Un nuevo proyecto en Reino Unido y Estados Unidos intenta entender cómo piensan y qué sienten los niños diagnosticados con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).

Los investigadores del King's College de Londres esperan que el estudio de las experiencias de estos niños puedan mejorar el diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad psiquiátrica infantil que actualmente todavía es muy desconocida.

Debido a los problemas de conducta que a menudo se presentan con el trastorno muchos de estos niños no pueden ser integrados en los sistemas escolares convencionales.

Corey Francis, de 10 años, es uno de ellos. Hace un año fue expulsado de su colegio y desde entonces debe pasar cada día en casa de abuela mientras sus padres trabajan.

El niño fue diagnosticado con TDAH, igual que cerca de 5% de la población escolar infantil de Reino Unido, y además sufre trastorno del espectro autista.

Como resultado de sus enfermedades es incapaz de controlar su enojo y tiene dificultad para concentrarse. Necesita mucho apoyo estructurado y supervisión, algo que, según su familia, el colegio no pudo ofrecerle.

Sus experiencias de vivir con TDAH muestran las dificultades que muchos niños enfrentan en Reino Unido y muchos otros países para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuado para el trastorno.

subirVoces de los niños

El nuevo proyecto, basado en entrevistas con más de 150 niños en Reino Unido y Estados Unidos que han sido diagnosticados con la enfermedad, intenta entender con más profundidad a estos pacientes.

La doctora Ilina Singh, profesora de bioética y sociedad del King's College, quien dirige el estudio, afirma que se trata de dar una voz a los niños en el debate actual sobre los tratamientos farmacológicos con estimulantes para tratar la enfermedad.

Estos medicamentos, como Ritallin y Adderall han causado grandes controversias en el pasado. Algunos críticos han expresado temores de que pueden causar daños y volver a los niños "robots o zombis".

Pero el estudio ha encontrado que los fármacos, que se recetan para ayudar a reducir la hiperactividad y mejorar la concentración, tienen un impacto positivo en su conducta y capacidad para tomar mejores decisiones.

"En áreas de desarrollo moral no encontramos evidencia de algún daño" explica la doctora Singh a la BBC, y añade que "esas suposiciones dañan a los niños más que los fármacos".

El equipo entrevistó a niños de entre 9 y 14 años y aunque no todos estaban bajo medicación cuando fueron entrevistados, la mayoría tenía experiencias de haber tomado las medicinas en algún momento desde que fueron diagnosticados.

"Los que estaban siendo medicados se sentían más capaces de poder ejercitar el control. Incluso si ya no tomaban los fármacos habían aprendido estrategias para manejar su conducta" agrega.

El profesor Peter Hill, psiquiatra infantil y de adolescentes, afirma que ya no es tan controvertido decir que los medicamentos ayudan a los niños con TDAH.

"Cada lineamiento sobre terapias dice que la medicación tiene que formar parte de todo el tratamiento. Es una parte importante del paquete, además de educar a las familias sobre TDAH".

El experto explica que los estimulantes incrementan la cantidad de dopamina en el cerebro y ayuda a restaurar un nivel de funcionamiento normal.

La doctora Singh subraya que el tratamiento no sólo debe enfocarse en fármacos. "El mensaje es que los niños quieren más opciones de tratamiento. No contamos con terapias conductuales bien desarrolladas en este país".

La meditación, terapia cognitivo conductual, ambientes de aprendizaje flexible y ejercicio físico deben formar parte también de los tratamientos, dice.

Otro hallazgo importante en las entrevistas es que los niños a menudo no entienden su enfermedad o no sienten que puedan tener una conversación significativa con sus médicos.

subirDivisión cultural

El proyecto mostró asimismo que hay una diferencia notable entre las experiencias de los niños británicos y los estadounidenses con TDAH.

En Reino Unido el enfoque está en hacer que estos niños se comporten bien mientras queen Estados Unidos el énfasis está en lograr que tengan un buen rendimiento académico.

En su entrevista Corey expresó sus deseos de tener a alguien con quien hablar de sus problemas, alguien en el colegio que pueda supervisarlo y ser su mentor.

El niño fue medicado con Ritalin pero éste le produjo un tic vocal y otro fármaco posterior no le ayudó mucho. Ahora está probando un tercer medicamento para reducir su agresión.

Según los expertos, si el niño hubiera sido diagnosticado de forma correcta cuando comenzaron sus problemas quizas no estaría ahora pasando los días en casa de su abuela.

Según Andrea Bilbow, del Servicio Nacional de Información y Apoyo sobre el Trastorno por déficit de atención, expresa que hay una falta de entendimiento en los colegios.

"Los colegios deben estar entrenados para identificarlo y llevar a cabo intervenciones de conducta apropiadas. Pero algunos maestros provocan a los niños con TDAH, igual que los otros niños", explica a la BBC.

Más que ninguna otra cosa, lo que Corey desea es tener un tratamiento adecuado, regresar a la escuela y volver a ser "normal". "Yo era el mejor jugador de fútbol en el colegio" dice.

 

Fuente: 
http://www.cooperativa.cl/noticias/sociedad/ciencia/sepa-que-piensan-los-ninos-con-deficit-atencional/2012-10-27/171025.html

¿Qué edad tiene que tener un niño antes de empezar a jugar videojuegos?

Con la gran cantidad de videojuegos, software de computadora, programas de televisión, aplicaciones para teléfonos inteligentes y juegos para tabletas en el mercado, no es una sorpresa que muchos padres se preocupen de que su niño pase demasiado tiempo en frente de una pantalla. Aunque estas cosas parecen inocentes, jugar videojuegos puede tener sus desventajas. Conocer lo que los expertos tienen que decir te ayudará a determinar la mejor edad para dejar a tu hijo jugar su primer videojuego.

 

Edad apropiada

Según la American Academy of Pediatrics, los niños de menos de 2 años no deberían tener tiempo en frente de la pantalla, y eso incluye la televisión y videojuegos de cualquier tipo. Esto no quiere decir que deberías dejar que tu hijo juegue tantos videojuegos como quiera tan pronto haya cumplido los 2 años. El tipo de videojuegos también juega un rol en qué edad tiene que tener tu hijo antes de jugar. Los juegos que representan acción de la vida real, como la que ocurre en uno del tipo de guerra, son casi siempre inapropiados para niños pequeños, y muchos incluso están clasificados por ser apropiados para adolescentes y adultos solamente.

Peligros de los videojuegos

Pasar demasiado tiempo en frente de una pantalla jugando videojuegos puede tener efectos negativos en la salud general de tu hijo, sin importar su edad. Demasiado tiempo en frente de la pantalla incrementa el riesgo de obesidad e interfiere con su sueño también, según MayoClinic.com. Los niños de la edad de la escuela elemental que pasan demasiado tiempo jugando videojuegos también tienen un alto riesgo de tener problemas de comportamiento, y los juegos pueden impactar el rendimiento escolar. Dependiendo del tipo de videojuegos que tu hijo juega, también puede volverse insensible a la violencia.

Límites de tiempo

Tienes que limitar el tiempo de pantalla de tu hijo de una a dos horas por día, reporta la AAP. Sin embargo, ese tiempo total de pantalla significa que incluye la televisión, la computadora, los teléfonos y las tabletas, en adición a los videojuegos. Si tu hijo disfruta de los videojuegos, dale un límite de tiempo específico para que tenga tiempo suficiente para ver su programa de televisión favorito o para usar su aplicación favorita. Con unos límites de tiempo estrictos, será menos probable que pierdas el seguimiento del tiempo y que tu hijo se pase de su límite.

Consejos y consideraciones

Revisa las clasificaciones de cualquier videojuego en el cual tu hijo esté interesado jugar. Según los expertos de desarrollo infantil del sitio web Kids Health, todos los videojuegos tienen clasificaciones que te dan pistas sobre qué tipo de contenido verá tu hijo. La clasificación te hará saber si el juego incluye violencia, contenido sexual y otras imágenes inapropiadas para niños. También puedes ver las imágenes del juego antes de dejar que tu hijo lo juegue. Haz que tu hijo juegue sus videojuegos en una habitación común en lugar de en su dormitorio. Es más fácil controlar su tiempo cuando lo puedes ver en lugar de dejarlo en su habitación por largos periodos. Presta atención a cómo se comporta el niño después de jugar. Si está más agresivo, considera disminuir el tiempo de juego o cambiar su videojuego actual a uno más tranquilo.

 

Fuente: 
http://www.livestrong.com/es/edad-nino-empezar-info_1482/

Siete juegos para estimular el habla del bebé

Del balbuceo a las palabras. Este es el primer camino por el lenguaje que recorre el bebé. Comienza cuando emite sus primeros fonemas, alrededor de los siete o nueve meses. Cuando cumple los 12 o 15 meses, ya suele ser capaz de denominar algo por su nombre. A partir de entonces, y hasta que alcanza los cinco años, el pequeño desarrolla su capacidad lingüística. Amplía poco a poco su vocabulario y aprende a construir frases completas. El niño aprende a hablar.Este aprendizaje se produce de forma natural, pero adaptado al ritmo y características de cada menor. Sin embargo, sí hay juegos y actividades con las que se puede apoyar el habla del bebé. "La actitud de los padres no debe ser pasiva",  que sostiene que el medio que rodea al niño tiene un papel muy relevante en su desarrollo del habla. "Desde las primeras edades, el entrenamiento auditivo es la base para el correcto desarrollo de la comunicación oral", apunta, por su parte, Margarita Gil, directora de un gabinete de aprendizaje y lenguaje.A continuación se explican algunos juegos para apoyar a los pequeños en su aprendizaje del habla que recomienda esta especialista.

 

 4  juegos de sonidos para aprender a hablar.

Los juegos si son divertidos para los niños pero, además, le pueden ayudar a aprender a hablar.

El traductor de sonidos

Un buen ejercicio para que el pequeño aprenda a discriminar los sonidos y los relacione con el lenguaje es hacer de traductor de sonidos. Para ello, el adulto debe traducir con la palabra correspondiente los sonidos y ruidos cotidianos que se producen de forma habitual, como el timbre de la puerta, la lavadora o el teléfono. También se pueden utilizar los de la calle: una sirena, pitidos, un perro o coches. Y los de la naturaleza un pájaro, el viento, la lluvia, etc.

¿Dónde estoy?

Con este juego se puede enseñar a los más pequeños a localizar el origen del sonido. El adulto se puede ocultar en distintas partes de la casa y emitir un sonido desde su escondite. También se puede hacer esta actividad con la ayuda de un juguete sonoro.

¡Saca la lengua!

Una buena idea para trabajar la motricidad labiolingual es decirle al pequeño que su cara es una casita, en la que los ojos son ventanas, la nariz el timbre, la boca la puerta y la lengua un amigo que está dentro de ella. 

Este juego permite entrenar los movimientos. Para ello, hay que pedir al niño que llame al timbre, abra la puerta y que deje salir (y volver a entrar después) a su amigo para dar un paseo.

Vamos a soplar

Para aprender a articular bien las palabras, el niño debe ejercitar la respiración y también aprender a acompasar el ritmo de la misma. Un buen ejercicio para ello es jugar a hinchar globos. 

Otra propuesta es colocar pequeñas bolitas de papel o de algodón sobre una superficie lisa y soplar sobre ellas para lograr que lleguen las primeras a la meta.

3  juegos para ampliar y reforzar el vocabulario del niño.

Cuando el pequeño ya ha aprendido a expresar sus primeras palabras, se puede estimular y reforzar su vocabulario. Para ello existen otros juegos útiles, que le permiten, además, entender el significado.

Estas son algunas propuestas:

¿Qué hay ahí?

Un cuento con ilustraciones para niños, una lámina o una revista servirán para ayudar al pequeño a ampliar el vocabulario. El juego consiste en contemplar juntos las imágenes y pedirle que señale y enuncie lo que ve en ellas. Cuando no sepa el nombre de alguna de las cosas que observa, el adulto debe decirle qué es y hacerle una breve descripción.

El tren de las palabras

"Llevo un vagón de... (fruta, animales, colores, etc)". A partir de esta frase el niño y el adulto empiezan a llenar el tren con palabras de la familia elegida. El adulto puede incorporar las menos usuales para que el pequeño pueda participar de forma activa en el juego, a la vez que aprende nuevas palabras.

Veo, veo

Este clásico juego enseña al niño a describir cosas y le ayuda a desarrollar vocabulario. El menor (o el adulto) elige un objeto que esté a la vista y comienza a dar pistas, entre ellas, su color, la letra por la que empieza o su situación. El turno termina cuando el otro jugador adivina qué es.

Consejos para no frenar el habla del niño

  • Dejarle hablar. No interrumpir al niño cuando quiere expresarse para corregirle, ni terminar las frases por él para acelerar la conversación.
  • Aprovechar cualquier ocasión para introducir más vocabulario, explicarle las palabras nuevas y su significado.
  • Leer con el pequeño cada día y dejarle participar de forma activa en la lectura. Hay que responder a sus preguntas sobre ella.
  • No corregirle cuando articule mal una palabra. Es mejor introducir el término de forma correcta de nuevo en la conversación.
  • Los padres son el principal modelo lingüístico para el niño. Por eso hay que cuidar el propio vocabulario y evitar utilizar un lenguaje infantilizado con el pequeño.

 

Fuente: 
www.consumer.es

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