Mi bebé no fija la mirada

Los manuales sobre bebés indican unas pautas de desarrollo de la vista pero, ¿qué pasa si tu hijo no cumple con las expectativas previstas para su edad? ¿Tiene algún problema?

Etapas de desarrollo

- Recién nacido: Los ojos están completamente desarrollados al nacer (en un niño a término), pero aún así, no son capaces de distinguir entre luz y oscuridad ni ven más allá de 25 cm, ya que el cerebro todavía no está preparado para procesar las imágenes. Por eso, su visión es borrosa. No sabe usar los dos ojos a la vez, por lo que es posible que se le crucen.

- 4 semanas: Solo distingue bultos, sin apreciar contrastes ni colores.

5-6 semanas: Empieza a enfocar la mirada. A lo largo del segundo mes empieza a diferenciar colores primarios y brillantes, pero le cuesta distinguir colores parecidos como el rojo y el naranja.

2-3 meses: Si a los 3 meses el bebé no logra fijar la mirada, debe ser revisado por un especialista. Además, a esta edad comienza a distinguir colores y las imágenes ya no son borrosas.

5 meses: Enfoca objetos a distancia aunque aún los ve poco nítidos. A partir de este mes coordina vista y motricidad.

6 meses: Su visión ya se asemeja a la de un adulto, con visión en tres dimensiones, profundidad, colores, contrastes…

Niños prematuros: En un niño nacido antes de las 36 semanas los órganos no están completamente desarrollados, en especial la vista y el oído. Dependiendo de las semanas con las que nazca, su vista tardará más o menos en alcanzar el desarrollo normal. Por eso, a la hora de comparar los avances de un niño prematuro con los de uno nacido a término, tienes que tener en cuenta su edad corregida. 
 

¿Por qué no fija la mirada?

Existen varias señales de que el niño tiene algún problema en su vista o en su sistema nervioso:

- Si a los 3 meses no fija la mirada y sus ojos se mueven constantemente.

- Con 3 o 4 meses no sigue con ambos ojos un objeto.

- Tiene problemas para mover los ojos en alguna dirección.

- Sus ojos no están alineados: uno está derecho y el otro se desvía, o incluso se desvían los dos.

- El tamaño o el aspecto de un ojo es diferente del otro.

- Tiene que cerrar los ojos cuando sale al sol.

- Sus ojos siempre tienen lágrimas.

- Bizquea los ojos la mayoría del tiempo.

- Una de las pupilas parece blanca.

Si aprecias varios de estos síntomas en tu hijo, consulta al pediatra. Puede que no le pase nada y simplemente el desarrollo de tu hijo sea más lento, o ser un síntoma de alguna enfermedad de la vista (estrabismo, ambliopía) o del sistema nervioso central.

También puedes llevar a cabo una prueba sencilla (que en ningún caso resulta determinante, pero puede darte una pista): Tápale alternativamente cada uno de los ojos con la mano: si no llora, es que no ve bien con ese ojo; si llora, su vista está perfecta.

Ejercicios de estimulación

 

Si tu pediatra te confirma que tu bebé no tiene ninguna enfermedad y simplemente va un poco retrasado en su desarrollo, puedes practicar con él estos ejercicios de estimulación visual:

- La luz natural es importante para los ojos. No le tengas siempre en penumbras o con luz artificial.

- No coloques su cuna pegada a las paredes ni en un rincón, para que pueda observar diversos objetos de la habitación. Además, si es posible, muévela de vez en cuando para que cambien los objetos que quedan a su vista.

- Para ayudarle a fijar la vista, coloca tu cara enfrente de la de tu hijo. Una vez que haya enfocado la mirada en ti, mueve tu cabeza lentamente para que la vaya siguiendo. Es mejor si detrás de ti no hay cuadros ni muebles, ya que puede confundirse si ve muchas imágenes distintas.

- Muéstrale objetos de muchas formas y colores brillantes y muévelos de un lado a otro cerca de su cara. Hazlo a veces empezando por la derecha y otras veces por la izquierda, para estimular ambos ojos.

- Mueve una luz suave delante de sus ojos para que se acostumbre a seguirla con la mirada.

- No le obligues a estar constantemente fijando la mirada, puede estar cansado y querer dormir o simplemente cerrar los ojos. No le agotes.

- Colocar un móvil en su cuna con objetos de diferentes colores y sonidos es bueno, siempre y cuando ya pueda seguirlos con la mirada. No se lo coloques antes de los 2 meses, podría cansarle o sobreestimularle.

 

Fuente: 
http://www.todopapas.com/bebe/meses-del-bebe/mi-bebe-no-fija-la-mirada-4192